HISTORIA
La Fundación Proyecto Padres surgió en el año 2002, tras la crisis que golpeó duramente a nuestro país, a partir de la iniciativa de un grupo de padres que -preocupados por el futuro de sus hijos- se planteó qué hacer para ayudar a construir una mejor sociedad. Esta pregunta fue la que motivó miles de encuentros y desencuentros, eternos cafés nocturnos, ilusiones y desilusiones, papeles y mucha tinta detrás de un sueño: despertar en los padres argentinos la motivación por los proyectos más valiosos que tenemos en nuestra vida, los hijos. Proyectos que, en plena crisis, parecían desaparecidos o por realizarse en otro país.
Era necesario generar un movimiento de padres que comprendiera que la formación era una buena y necesaria excusa para la acción y promoción de alternativas que permitan la educación de sus hijos en ámbitos más favorables. Así empezamos, un ingeniero industrial soltero de 26 años, Leandro Cuccioli, un arquitecto casado con tres hijos, Jorge Prinz, y un docente casado con cuatro hijos, Adrián Dall’ Asta. Casi sin darnos cuenta, en menos de un año, habíamos organizado el Primer Congreso Argentino de Padres en La Rural, con mil participantes presentes. A partir de allí, comenzamos a desarrollar distintos programas de formación en distintas localidades del país pero ya no éramos tres con una buena idea, sino miles detrás de un ideal: los padres tenemos mucho por hacer.
Fundación Proyecto Padres completa así su ciclo natural de consolidación al formar un Consejo de Administración, integrado por nueve personas, e incorporar a su equipo de trabajo a profesionales de primer nivel que continúan con las líneas trazadas por los primeros tres fundadores.
En 2013 Fundación Proyecto Padres pasó a ser Fundación Padres, como signo de consolidación como organización referente de los padres y la familia en la Argentina y en la región.
Seguimos creyendo que una Argentina mejor es posible y por eso trabajamos cada día, con el mismo espíritu y la mirada puesta en el futuro, convencidos que tenemos hoy la misión de siempre: “Mejores Padres, Mejores Hijos, Mejores Argentinos”.
Sabemos que, junto a ustedes, el sueño continúa.